Cuando te veo mi corazón deja de latir durante una milésima de segundo y a la milésima siguiente empieza a latir con una fuerza incontrolable, me hace sonreír y no apartar la mirada de tus ojos que me miran y hacen que me sienta mucho mejor.
Me encanta notar tu mirada clavada a mi espalda, darme la vuelta y que me mires, te sonrojes y sonrías. Me encantaría que tuvieras el coraje para describirme lo que pasa en tu interior cuando me ves, y me encantaría descubrir que notas la misma sensación de lleno que yo.
Me encanta sentarme a tu lado y sentir que nada más importa, que puedo pasarme horas tumbada encima de tus piernas.
Me encanta que me mires, sonrías y te rías sin ninguna explicación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario