pero otras no basta un vida para olvidar un instante.
Conoces a un persona como conociste a cualquier otra, coincidisteis un año en clase, en un campamento, te la presentó un amigo, hay mil y una maneras. La conoces y te parece uno más. Luego pasas minutos, horas, tardes a su lado, te das cuenta de que él es especial, no es como los otros. Llegan los te quiero, fáciles, sin ser forzados, los mensajes y las largas conversaciones que esperas que nunca acaben. Llegan las movidas, los problemas, ya que estos no faltan en ninguna relación. Todo se soluciona. Empezar de cero o volver a estar como siempre, ¿quién sabe qué ocurrirá? Pero de repente ocurre, algo se acciona, te das cuenta de que conociste a una persona, pensando que sería uno más y acabó siendo lo más importante de tu vida.
Las personas entran en tu vida sin motivo aparente, entran y salen diariamente, las reencuentras un día así porque sí y las pierdes después de muchos años. Día a día te das cuenta, que hay gente especial, gente que empezó siendo una más y que ahora significa un simple todo en tu vida. De ser nada, un simple desconocido, pasaste a ser más importante que el aire para mí.
Y es que hay momentos que ocurre,algo se acciona, las cosas cambian, los te quiero dejan de ser tan vacíos, significan algo más, empiezas a entender el por qué de esas sonrisas cuando hablabas con él. No quieres que acabe, sabes que todo tiene final pero intentas alargarlo todo lo que puedes solo por el placer, no, no es placer, por la necesidad de estar a su lado. Un final que sí, llegará, pero ¿sabes? No tiene porque ser hoy, mañana, dentro de un año, puede que sea al final, el único final que existe realmente para todo.
No me va a bastar una vida para olvidar todo lo que paso contigo, cada sonrisa,cada mirada, cada tontería y cada quiero que llueva. ¿Sabes por qué? Porque no quiero tenerlo que olvidar nunca, porque quiero pasar meses, años a tu lado, si te tengo a ti los demás me sobran, no quiero a ninguno más que a ti.
¿Ya estás contento no? Hemos llegado a un punto en el que mi felicidad depende única y exclusivamente de la tuya. Ahora eres una droga, mi droga preferida. Eres mi puta adicción.
Un minuto para conocer a una persona especial, dos horas junto a él para sentir algo más, tres días enteros para amarle como nunca, cuatro vidas para intentarle olvidar.
Conoces a un persona como conociste a cualquier otra, coincidisteis un año en clase, en un campamento, te la presentó un amigo, hay mil y una maneras. La conoces y te parece uno más. Luego pasas minutos, horas, tardes a su lado, te das cuenta de que él es especial, no es como los otros. Llegan los te quiero, fáciles, sin ser forzados, los mensajes y las largas conversaciones que esperas que nunca acaben. Llegan las movidas, los problemas, ya que estos no faltan en ninguna relación. Todo se soluciona. Empezar de cero o volver a estar como siempre, ¿quién sabe qué ocurrirá? Pero de repente ocurre, algo se acciona, te das cuenta de que conociste a una persona, pensando que sería uno más y acabó siendo lo más importante de tu vida.Las personas entran en tu vida sin motivo aparente, entran y salen diariamente, las reencuentras un día así porque sí y las pierdes después de muchos años. Día a día te das cuenta, que hay gente especial, gente que empezó siendo una más y que ahora significa un simple todo en tu vida. De ser nada, un simple desconocido, pasaste a ser más importante que el aire para mí.
Y es que hay momentos que ocurre,algo se acciona, las cosas cambian, los te quiero dejan de ser tan vacíos, significan algo más, empiezas a entender el por qué de esas sonrisas cuando hablabas con él. No quieres que acabe, sabes que todo tiene final pero intentas alargarlo todo lo que puedes solo por el placer, no, no es placer, por la necesidad de estar a su lado. Un final que sí, llegará, pero ¿sabes? No tiene porque ser hoy, mañana, dentro de un año, puede que sea al final, el único final que existe realmente para todo.
No me va a bastar una vida para olvidar todo lo que paso contigo, cada sonrisa,cada mirada, cada tontería y cada quiero que llueva. ¿Sabes por qué? Porque no quiero tenerlo que olvidar nunca, porque quiero pasar meses, años a tu lado, si te tengo a ti los demás me sobran, no quiero a ninguno más que a ti.
¿Ya estás contento no? Hemos llegado a un punto en el que mi felicidad depende única y exclusivamente de la tuya. Ahora eres una droga, mi droga preferida. Eres mi puta adicción.
Un minuto para conocer a una persona especial, dos horas junto a él para sentir algo más, tres días enteros para amarle como nunca, cuatro vidas para intentarle olvidar.
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